En un contexto donde la educación pública y de calidad está intentando ser socavada, la comunidad de la Facultad de Ciencias Económicas de la Universidad Nacional de La Plata (FCE UNLP) alza su voz para defenderla y reivindicarla como pilar fundamental de la sociedad. La universidad pública, más allá de ser incuestionablemente un espacio de formación académica, constituye también un motor estratégico para la movilidad y el desarrollo social, cultural y científico del país.

Hoy, ante un escenario que nos es especialmente adverso, queremos hacer público nuestro posicionamiento:

1. ESTAMOS CONVENCIDOS DE QUE LA UNIVERSIDAD PÚBLICA Y DE CALIDAD SE DEFIENDE SOSTENIENDO EL PROCESO EDUCATIVO
   Desde hace años, en la FCE UNLP, consideramos como uno de nuestros principios básicos que la educación superior, pública y de calidad se defiende con las aulas abiertas y haciéndola funcionar. Un funcionamiento que tiene que ser entendido como una condición de base, como una condición necesaria para que la educación impartida y los procesos de enseñanza y aprendizaje, puedan resultar de calidad y excelencia.
   En este marco, es importante atender a que el funcionamiento institucional no puede ser reducido a un mero trámite burocrático o a un campo de batalla ideológico. Sostener el proceso educativo y la institución funcionando, representa algo mucho más ambicioso que eso. La esencia del buen funcionamiento universitario se traduce y manifiesta en la capacidad para generar conocimiento, formar profesionales íntegros y contribuir al progreso social. Entendemos que es a través de su funcionamiento diario, de sus equipos docentes capaces y dedicados, de su investigación de vanguardia y de la transferencia y la extensión de su conocimiento en la comunidad, que la universidad pública cumple su misión y fortalece la democracia.
    
2. CREEMOS FIRMEMENTE QUE EDUCARSE CONSTITUYE UN DERECHO ESENCIAL QUE DEBE PRIORIZARSE
   La educación es un derecho fundamental protegido en la Declaración Universal de Derechos Humanos de 1948 y, sin lugar a duda, la enseñanza de nivel superior es parte sustancial de este derecho. Compartimos la concepción de que la educación debe erigirse como un derecho esencial para nuestros jóvenes y como tal, no puede ser condicionado por factores económicos o sociales. Así, estamos convencidos que es nuestra responsabilidad como institución velar y resguardar ese derecho, y por lo tanto debemos priorizar a nuestros estudiantes al momento de tomar decisiones.
   Es amplio el consenso sobre que la universidad pública debe brindar la posibilidad y ser accesible a todos aquellos que tengan la capacidad y el deseo de formarse, independientemente de su origen socioeconómico y, desde la FCE UNLP, adherimos a tal afirmación. Trabajamos diariamente para materializar esta definición y cumplir con esta función social definida por la Ley 24521, Ley de Educación Superior argentina, al procurar democratizar la educación universitaria para contribuir a una distribución más equitativa del conocimiento y posibilitar una genuina igualdad de oportunidades. Creemos que esto se trata de un derecho inalienable y, por este motivo, ratificamos nuestro compromiso con él y con la protección, ante todo, del espacio formativo.
    
3. ESTAMOS PREOCUPADOS RESPECTO A LA SITUACIÓN PRESUPUESTARIA DE LAS UNIVERSIDADES NACIONALES
   Expresamos nuestra profunda intranquilidad sobre el futuro sostenimiento financiero de la universidad pública. La insuficiencia de recursos genera que la educación masiva, inclusiva y de calidad, así como el derecho a educarse de nuestros jóvenes, se encuentre en estado de alerta.
   La situación actual de incertidumbre atenta y limita el potencial de la universidad pública para cumplir su rol y finalidad social.
    
4. NOS GENERA INQUIETUD Y PREOCUPACIÓN EL POSICIONAMIENTO DE LAS AUTORIDADES NACIONALES RESPECTO A LA EDUCACIÓN PÚBLICA DE NIVEL SUPERIOR
   Ciertas declaraciones por parte de autoridades nacionales que, como es de público conocimiento, expresan recelo y desconfianza sobre la comunidad universitaria, nos inquietan e interpelan. Nos preocupa la visión que algunos sectores poseen y han manifestado sobre la educación pública, y especialmente, sobre la educación superior brindada por las instituciones de gestión estatal.
   En virtud de esto queremos llamar a la reflexión a las autoridades nacionales, a los representantes políticos y a la sociedad en general, para convencerse de la relevancia y trascendencia que tiene defender una universidad pública y de calidad. Poseemos la firme convicción de que resulta indispensable un genuino compromiso con la autonomía académica y con la libertad de expresión dentro de las universidades, así como un sólido y previsible financiamiento. La educación superior pública y de calidad es, indudablemente, una inversión en el futuro del país.

Esperamos que nos sigan acompañando en este camino que hemos elegido y los invitamos a defender y reafirmar, una vez más, que "educando, construimos futuro".

Lic. Eduardo A. De Giusti
Decano
Facultad de Ciencias Económicas
Universidad Nacional de La Plata