Por Unidad de Comunicación Institucional FCE UNLP

"Deben ponerse en debate algunas cuestiones asociadas al modo de conducir y gestionar las universidades" - Entrevista a María de la Paz Colombo

 

En la síntesis del proyecto se plantea "una cierta obsolescencia de las nociones sobre las que se construyeron los actuales modelos y arquetipos de gobierno y gestión de las universidades". ¿A qué refiere exactamente esta afirmación?

- Las ideas tradicionales de gestión de la educación superior suelen estar circunscriptas a la preservación y el cumplimiento de los objetivos universitarios básicos junto con el desarrollo de algunas funciones administrativas y de coordinación entre áreas académicas y/o científicas y las de soporte. Ahora bien, en el último tiempo, debido a los cambios del contexto, las instituciones universitarias y su gestión se ha complejizado en virtud de: su importancia social, la incertidumbre, las vinculaciones y los efectos recíprocos con numerosos actores que poseen intereses dispares, la necesidad de operación simultánea de diversos factores (internos y externos), la mayor competitividad, etc. En este marco de complejidad, procurar reconciliar las tensiones entre calidad y masividad, favorecer la inclusión y a la vez dinamizar las trayectorias estudiantiles, dotar de mayor flexibilidad el diseño de la oferta académica atendiendo las demandas diferenciales del grado, del posgrado y más aún las de la educación formal alternativa, establecer estándares y criterios para llevar adelante mecanismos de seguimiento, evaluación y control permanente, atender los resultados e impactos del desarrollo de las distintas actividades que la Unidad Académica genera en la sociedad, construir o consolidar una identidad y una cultura institucional sólida y compartida, lograr un eficiente uso de los recursos y su sostenibilidad, son preocupaciones y dimensiones que deben ser contempladas por los nuevos modelos de gestión universitaria. Resumiendo, los cambios que se están produciendo en el mundo y en la sociedad imponen a las universidades y más específicamente quienes las gestionan, asumir el desafío crítico de intentar conjugar los principios de excelencia, calidad, equidad, relevancia, pertinencia y eficiencia con las finalidades y funciones sustantivas para las cuales fueron originalmente concebidas (docencia, investigación, extensión y transferencia). Es decir, en este contexto cambiante, turbulento e incierto, deben ponerse en debate algunas cuestiones asociadas al modo de conducir y gestionar las universidades para lograr poder dar respuesta efectiva a las necesidades que la realidad actual reclama.

 

También se afirma que el estudio que se propone es descriptivo y correlacional ¿En qué consiste esta modalidad?

- En primer lugar es importante tener en claro que, al hablar de “tipos de estudio”, estamos haciendo referencia a cuestiones vinculadas a la metodología para llevar adelante una investigación.  Puntualmente se trata de 2 modalidades diferentes dentro de las 4 básicas posibles. Pueden desarrollarse estudios exploratorios, descriptivos, correlacionales o explicativos. El tipo de investigación que se decida realizar dependerá, por un lado, del enfoque que el equipo de investigación le quiera dar a su estudio y, por otra parte, del estado del conocimiento sobre el tema que se posea a partir de la revisión de la literatura científica. Específicamente para dar respuesta a algunos de los objetivos previstos, propusimos un tipo de estudio descriptivo, que implica que intentamos especificar características relevantes de ciertas cuestiones que deseábamos analizar vinculadas a procesos universitarios y a la gestión de la educación superior. Para otros objetivos del proyecto, planteamos un tipo de estudio correlacional, que quiere decir que indagamos sobre la existencia o no de determinadas relaciones entre variables, en nuestro caso, asociadas a la enseñanza, a la investigación, a la extensión y a la transferencia. Es importante tener en cuenta que, definir el tipo de estudio resulta fundamental porque en función de esto va a variar la estrategia de investigación, es decir: el diseño de ésta, los tipos de datos que se van a relevar, la manera de obtenerlos, el muestreo que se debe realizar y otros componentes del proceso. Igualmente también debe tenerse presente que, en la práctica, cualquier estudio puede incluir elementos de más de una de estas modalidades. A nivel metodológico, una vez que definimos que tipo de estudio a realizar, planteamos el diseño al que recurriríamos, que en esta ocasión fue una investigación no experimental, es decir estudiamos los procesos tal y como se dan en la realidad (sin manipular las variables) y optamos como técnica de abordaje, por una triangulación metodológica, que implica que combinamos estudios cuantitativos y cualitativos.

 

Uno de los objetivos de la investigación está centrado en la enseñanza de grado y específicamente en  las tendencias en el ingreso y el egreso en las Facultades de Ciencias Económicas Nacionales. Comparativamente ¿Cuáles son las principales coincidencias y diferencias entre las distintas unidades académicas?

- En primera instancia es importante aclarar que, las conclusiones a las que arribamos, corresponden al período 2007 – 2015 dado que, por un lado fue el primero de los objetivos de esta investigación que se abordó (en el año 2016) y, por otra parte, por la accesibilidad de los datos de otras Unidades Académicas disponibles en los registros de la Secretaría de Políticas Universitarias. Efectuadas estas salvedades, en relación al ingreso en las carreras asociadas a las ciencias económicas  es posible afirmar que la cantidad de inscriptos ha aumentado aproximadamente un 10% en ese período, impulsado fundamentalmente por un incremento en la matrícula en las universidades privadas. Realizando un análisis comparativo se observa que, si bien en términos generales la FCE UNLP presenta un comportamiento similar al del conjunto de las Unidades Académicas de la disciplina, comparando específicamente la demanda de carreras de grado de la Facultad con aquellas de gestión estatal, nuestra institución se halla mejor posicionada dado que el crecimiento relativo de esta variable ha sido superior en los años bajo consideración. En cuanto al egreso, el número de graduados totales de carreras de ciencias económicas presenta una tendencia general creciente. Efectuando un análisis según el tipo de gestión de la Unidad Académica, en los últimos años registrados, la cantidad de egresados de instituciones públicas se ha mantenido relativamente constante mientras que los de instituciones de gestión privada se han incrementado en tasas cercanas al 50%. En la FCE UNLP, esta cantidad ha aumentado proporcionalmente menos que la del resto del total de las Facultades y registra valores similares a los de las otras universidades nacionales.
Avanzando en el análisis de las dos variables mencionadas, ingresantes y egresados, calculamos  también la tasa de graduación por cohorte o la eficacia terminal tal como la denominan algunos autores. Se trata de un indicador importante a tener en cuenta para medir la proporción de egresados en relación a los nuevos inscriptos y/o ingresantes de una institución. La información relevada nos permitió concluir que para las carreras de ciencias económicas en general este índice es del orden del 30%, y para las instituciones de gestión estatal, es del 27%. La Facultad por su parte posee un indicador promedio de ingresantes de cohorte real sobre graduados, levemente menor, aproximadamente del 25% el cual registra algunas oscilaciones interanuales que deben tenerse presentes. En el período estudiado, en términos globales, esta tasa ha conservado cierta estabilidad sea cual sea su nivel de agregación pero, más allá de esto, debe considerarse las mismas aún se encuentran distantes de los estándares promedio internacionales.

 

El proyecto propone indagar también sobre las trayectorias de los estudiantes de la FCE UNLP considerando la deserción o abandono de sus estudios universitarios. ¿A qué conclusiones arribaron en este sentido?

En términos de trayectorias académicas, existen dos problemáticas que se encuentran íntimamente relacionadas y emparentadas: la permanencia de los estudiantes y su deserción las cuales, en definitiva, constituyen dos caras de la misma moneda. Antes que nada debe tenerse en cuenta que se considera deserción a aquella situación a la que se enfrenta un estudiante cuando aspira y no logra concluir su proyecto educativo. Es decir, se trata de un abandono de tipo voluntario que puede ser el resultado de diferentes factores: preuniversitarios, académicos, institucionales, individuales, familiares, psicosociales y socioeconómicos, entre otros. Son entonces estos factores los que influyen y determinan en gran medida la integración social y académica de los alumnos, generando un efecto positivo –incrementando la probabilidad de permanecer– o bien presionando negativamente, es decir, aumentando la probabilidad de abandonar sus estudios. Autores reconocidos por sus investigaciones sobre la educación superior tales como Vicent Tinto, destacan que existen dos períodos críticos en la trayectoria de los estudiantes pueden ser determinantes para su deserción y/o su permanencia. Uno de ellos es el que se produce durante su admisión o primer ingreso a la Facultad y, el segundo, el que ocurre cuando efectivamente experimenta la transición entre la enseñanza de nivel medio y la de formación superior, el cual suele darse más específicamente durante la última fase del primer año de estudios y antes del comienzo del segundo año de la carrera escogida (es aquí donde se registran los mayores índices de abandono).
En este marco, lo primero que se debe entender es que, la UNLP en general y la FCE UNLP en particular, adopta una política abierta en términos de ingreso y por tal no implementa “cursos ni evaluaciones de ingreso eliminatorias”, así como tampoco solicita condiciones académicas o administrativas adicionales al título del nivel educativo inmediato anterior. Esta postura y decisión genera necesariamente como consecuencia un mayor nivel de desgranamiento o deserción que la implementación de una política más restrictiva del ingreso. Nuestra Facultad considera que dicha política de ingreso irrestricto es una fortaleza y por este motivo no se encuentran previstas acciones o estrategias que modifiquen esta situación. Sin embargo, no debe desconocerse que, una matrícula masiva da necesariamente lugar a lo que Ezcurra considera como un fenómeno global emergente que produce otra tendencia estructural en sentido opuesto a su objetivo final que es la de las altas tasas de deserción. En segunda instancia debe tenerse en cuenta que existen circunstancias que exceden el marco de acción real de la institución. Todos los años, la cantidad total de inscriptos en la FCE UNLP sufre una primera merma cuando estos deben formalizar su inscripción a las asignaturas del 1º año (sin mediar entre dichas inscripciones otra variable más que el mero transcurso del tiempo). Con posterioridad existe también un porcentaje de los mencionados anotados que, finalizado el período previsto para acreditar el egreso del nivel secundario (abril y/o agosto), no logran concluir exitosamente sus estudios (el 22% aproximadamente de los inscriptos originales) y por tal motivo su inscripción en la Facultad debe darse de baja. Podría afirmarse entonces que la causa de estos primeros “abandonos” no poseen relación directa con las acciones (o con la inacción) de la propia Unidad Académica, pues dichas personas oportunamente inscriptas siempre conservaron su condición de “aspirantes” al no lograr cumplir o completar las condiciones formales requeridas para ingresar efectivamente a la Facultad.
Depurado el análisis de estas cuestiones, tanto en la FCE UNLP como en otras Unidades Académicas de gestión estatal consideradas comparables, existe una proporción no menor de ingresantes efectivos que no registran inscripciones al año siguiente al que formalizaron su ingreso en la institución, los cuales sí deben ser evaluados como alumnos que abandonan o desertan en términos estrictos. Ahora bien, los valores vinculados a esta variable requieren de un análisis particularizado que debe ir más allá de un mero índice ya que éste por sí mismo no logra ser lo suficientemente ilustrativo o representativo de una problemática tan compleja. En este sentido y a modo de recomendación, estimamos que es sobre este conjunto de estudiantes que debe profundizarse el análisis y orientar los mayores esfuerzos para delimitar a cuáles de las causas antes aludidas obedece dicha deserción con el fin de diseñar posibles estrategias de intervención, oportunas y pertinentes, que permitan minimizarla.

 

El proyecto en ejecución también hace foco en la enseñanza de posgrado en las Facultades de Ciencias Económicas Nacionales ¿Qué datos relevantes arroja la investigación en este punto?

- En cuanto a la enseñanza de posgrado la investigación desarrollada procuró describir y analizar la situación del conjunto de las carreras de este nivel formativo acreditadas en Argentina (especializaciones, maestrías y doctorados) atendiendo las tendencias observadas tanto desde el punto de vista de la oferta como el de la demanda. Particularmente se trabajó sobre tres cuestiones específicas: la composición de la oferta de carreras acreditadas por la CONEAU en Argentina; la tendencia de dicha oferta y la efectividad de la misma en el país. En relación a la composición de la oferta de carreras de posgrado, la primera conclusión a la que se arribó y que se estima valiosa, es que la actividad de posgrado en Argentina se concentra fundamentalmente en instituciones públicas, siendo más evidente esta concentración en las carreras de doctorado. En lo que respecta a la tendencia general de esta oferta, la información relevada y analizada ha dejado en manifiesto la problemática que se presenta ante: una demanda potencial creciente, una demanda efectiva estable y una oferta de carreras de posgrado en ascenso (aunque a un ritmo que comienza a desacelerarse en los últimos años). En este sentido, son muchas las hipótesis que podrían establecerse principalmente centrando la atención en la demanda constante que en la actualidad se registra. Así por ejemplo podría estimarse que el mercado no es “capaz de reconocer” debidamente la relevancia y el impacto que posee realizar una carrera de posgrado, o bien que las organizaciones del medio prefieren otras herramientas para formar sus recursos humanos, o que la oferta no se adecúa a las necesidades actuales, o que la reglamentación no permite la flexibilidad que un contexto como el actual requiere. Habida cuenta de esto, probablemente, como en toda situación compleja serán más de una las causas que explicarán el diagnóstico y los resultados que se han obtenido. Por último se trabajó para generar un indicador de efectividad de las carreras. En este caso se partió de la convicción de que en la actividad de posgrado es eficaz y efectiva si aquellas carreras que se han diseñado funcionan, es decir si cuentan ciertamente con alumnos (analizado a partir de la demanda real de cada una de ellas). Para evaluar este indicador se vinculó la oferta de cada institución con los inscriptos a sus carreras de posgrado. Al respecto se ha observado: una tendencia a la baja de cantidad de alumnos inscriptos por carrera y un nivel de dispersión respecto al promedio dispar dependiendo de cada una de las instituciones consideradas, sin embargo en las universidades nacionales la situación parece ser más estable que en aquellas de gestión privada (salvo algunas excepciones específicas). Estas primeras aproximaciones dejan abiertas futuras líneas de investigación para abordar y ahondar en la temática estudiada partiendo de la premisa de que los problemas complejos no tienen un único determinante sino que son de multicausales. La situación de los posgrados en Argentina, al igual que la situación del sistema de educación superior en general, plantea complejidades y por ello para ser interpretada adecuadamente debe ser contextualizada y analizada a la luz de la coyuntura del  país, de las demandas del mercado laboral, de las tendencias internacionales y de los aspectos institucionales y socioeconómicos preponderantes.

 

Hay otra investigación en curso: “Perspectivas y desafíos de las instituciones de Educación Superior de Ciencias Económicas en Argentina: identidad, trayectorias y gestión del conocimiento”  ¿Cuáles son los objetivos trazados?

- En realidad no se trata aún de una investigación en curso sino de un proyecto que se ha presentado para su evaluación en la convocatoria de este año y por tal, en caso de ser acreditado, comenzaría a desarrollarse en 2020. Este nuevo proyecto fue pensado para examinar algunas de las problemáticas y desafíos que enfrenta actualmente la educación superior. Para ello nos hemos planteado por un lado profundizar en la línea sobre la que estamos hoy trabajando vinculada el estudio de ciertos procesos universitarios relacionados con la enseñanza y la investigación y, adicionalmente comenzar a indagar sobre la construcción y consolidación de imagen e identidad institucional en las universidades. Concretamente, el propósito básico es poder dar cuenta y someter a discusión políticas y estrategias de gestión de las instituciones universitarias de ciencias económicas en general y de la FCE UNLP en particular. Así entonces, y en forma más específica, nos trazamos objetivos en relación a tres ejes: los aspectos institucionales (que atañen a toda la Unidad Académica), la enseñanza de grado y la gestión de la investigación y del conocimiento. Vinculado al primero de los ejes, nos propusimos: identificar y describir las dilemas y nuevos paradigmas vinculados a la educación superior y a la gestión de ésta; y analizar y poner en relación los modelos de identidad de marca existentes y las categorías conceptuales provenientes del enfoque semiótico y comunicacional del estudio de marcas con las características organizacionales y contextuales de las universidades públicas nacionales. Por otro lado, asociado con la enseñanza de grado, el foco lo hemos puesto principalmente en avanzar y ahondar sobre las cuestiones ligadas a la permanencia de los estudiantes y sus trayectorias académicas ya que, hoy por hoy, parecería haberse vuelto el proceso más desafiante de gestionar con eficiencia en las instituciones universitarias de gestión estatal.
Finalmente, y en relación al tercer eje, el estudio se orientaría al relevamiento, la identificación y la descripción de los modelos vigentes globalmente de gestión universitaria de la investigación; al análisis de las modalidades para la gestión del conocimiento generado en su etapa final -su   transferencia y vinculación tecnológica- y a la indagación sobre vinculaciones del proceso de investigación con las demás funciones básicas universitarias.

 

¿Cómo se vinculan ambas investigaciones?

- Este segundo proyecto vinculado a la gestión universitaria, puede verse como una continuidad del anterior y ha surgido por la necesidad de profundizar sobre algunas cuestiones que surgieron a partir de los hallazgos, los resultados y/o de nuevos interrogantes que se generaron a partir del desarrollo de la primera investigación (la cual se encuentra en su fase final) y además, por la necesidad de indagar sobre nuevas aristas aún inexploradas en nuestra Facultad pero que se estima que poseen efectos importantes en el devenir de la institución.
Las universidades públicas nacionales, como instituciones abiertas, políticas, plurales, fracturadas, de carácter multidimensional y ambiguo, dan lugar a procesos y lógicas de administración y gestión muy específicos con propiedades singulares y distintivas que requieren ser analizadas, revisadas y repensadas periódicamente en profundidad. De este modo, avanzar en su estudio se vuelve sustancial para lograr reconocer las particularidades de los procesos y resultados que se dan (o deberían dar) en su seno a fin de intentar comprenderlas de un modo más acabado y cabal y así avanzar hacia modelos de gestión más pertinentes y acordes a su naturaleza, al contexto y a las demandas sociales de la actualidad.